El blog como estrategia de aprendizaje

Las estrategias de aprendizaje son procedimientos “que un alumno adquiere y emplea intencionalmente como instrumento flexible, para aprender significativamente y para solucionar problemas y demandas académicas” (Díaz Barriga, Castañeda y Lule, 1986; Hernández, 1991; citados por Díaz Barriga y Hernández Rojas, 1997: 151).
En la aplicación de las estrategias de aprendizaje interactúan distintos tipos de procesos cognitivos tales como la atención, percepción, almacenaje, recuperación, entre otros. También influyen de manera decisiva en la selección y formas de utilización de estas estrategias, los conocimientos previos del aprendiz, así como el llamado conocimiento metacognitivo (conocimiento sobre cómo aprendemos, sobre nuestros procesos cognitivos cuando aprendemos).

ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE
Nos basamos en dos categorías de estrategias: las estrategias cognitivas y las metacognitivas. Según Flavell (1993: 106), las estrategias cognitivas se emplean para “hacer” avances y las metacognitivas para “controlarlos”.
Gaskins, I. y Thorne, E. (1999) enumeran tanto estrategias cognitivas como metacognitivas:

Estrategias cognitivas
a) Estrategias para alcanzar el sentido y recordarlo: explorar, acceder al conocimiento previo, predecir, formular hipótesis y/o plantear objetivos, comparar, hacer inferencias, seleccionar y organizar ideas importantes, elaborar ejemplos, contraejemplos, analogías, resumir la información, monitorear el avance / logro de los objetivos, clasificar información, identificar relaciones y modelos, transferir y aplicar conceptos a nuevas situaciones.
b) Estrategias para la producción de conocimiento: reconocer, identificar o admitir un problema, definir o analizar el problema, decidir sobre un plan, poner en funcionamiento el plan, evaluar tanto el avance hacia la solución como la solución, acceder a lo que ya se sabe sobre el problema, generar hipótesis, enunciar conclusiones.

Estrategias metacognitivas
En cuanto a los factores relativos a la tarea que es necesario resaltar están:
• Identificar la tarea. Establecer una meta, determinar los materiales que harán falta, decidir si la tarea es una sola o comprende subtareas.
• Los objetivos de la tarea.
• Las características del contenido: reflexión sobre los diferentes tipos de contenido.
• Activar o acceder a conocimientos previos y decidir si son necesarias o no las estrategias compensatorias (por ejemplo leer un libro).
• Determinar criterios de éxito.
• Organizar, delinear o representar gráficamente ideas del propio conocimiento previo.
El proceso de toma de decisiones estratégicas implica el análisis y explicitación de un conjunto de variables entre las cuales los factores personales son los primordiales. Entre ellos se puede destacar:
• Los recursos personales: conciencia de la disponibilidad individual de las capacidades que requiere la tarea a realizar (concentración, memorización, comprensión) y el dominio de habilidades, técnicas de estudio y estrategias de aprendizaje.
• El interés sobre el tema que se está tratando.
• La explicitación de las propias capacidades y dificultades para resolver la tarea.
Las estrategias también influyen en la autorregulación por medio del sistema de creencias de los estudiantes. En investigaciones sobre el tema, Zimmerman (1989, 1990) apunta que los alumnos autorregulados se sienten eficaces en el uso de estrategias y creen que su utilización les permitirá alcanzar metas a niveles superiores.
El conocimiento condicional, que consiste en entender cuándo y por qué emplear ciertos conceptos y procedimientos, forma parte del aprendizaje autorregulado, que requiere que los estudiantes decidan qué estrategias utilizar antes de entregarse a la tarea.
Ayudar a sus alumnos a desarrollar el aprendizaje autorregulado si les proporcionan estrategias para enfrentar los materiales nuevos.